El Ministerio de Industria autoriza a Repsol la construcción del oleoducto Cartagena-Pueertollano de 352 kilómetros de longitud.
Esta infraestructura, necesaria para suministra de petróleo la refinería de Puertollano (en el interior), ha pasado "sin pen, ni gloria" todos los trámites administrativos necesarios para su aprobación.
En su zona de influencia ninguna asociación vecinal, agrícola, sindicato, partido político, asociación ecologista..., ha protestado por esta infraestructura, nadia ha dicho nada. Todos están conformes y la administración le ha dado la autorización.
Me pregunto porqué no está ocurriendo igual con el oleoducto y con el proyecto de Refinería Balboa en Extremadura.
Me hace preguntarme el peso que tienen las grandes petroleras en España, Repsol no ha tenido ningún problema con el oleoducto, ni tampoco con la refinería que está construyendo en Cartagena, de características similares a Refinería Balboa. Ya tiene la Declaración de Impacto Ambiental.
Cepsa, por su parte, también tiene la Declaración de Impacto Ambiental y ya está construyendo sus nuevas instalaciones en Huelva.
¿Qué pasa? Refinería Balboa no es nadie y Cepsa y Repsol sí?
Los extremeños tenemos que manifestarnos para que el Gobierno Central apruebe el proyecto de Refinería Balboa porque cumplirá con creces todos los requisitos legales, técnicos y medioambientales solicitados. Tenemos que pedir al Ministerio de Medio Ambiente que no demore más en el tiempo la Declaración de Impacto Ambiental.
Extremadura necesita la refinería ya.
